A l e a t o r i a

 

¿Algún días volveremos a jugar en la hierba verde y la tierra húmeda?

A veces tengo miedo de quedarme atrapada para siempre en este espiral.

Tengo náuseas y el agüita de manzanilla no ayuda.

Me siento a descansar pero luego sube la marea y ya todo se da vuelta otra vez.

Desearía ser un pájaro, pero luego recuerdo que esto no más que un eterno océano, y mis alas son demasiado inexpertas para tan largo viaje.

Solía pensar que todo era efímero hasta que se me hizo eterno.

Solía dibujar los sueños que tenía, solía escribir en las hojas de mis bolsillos, pero el futuro al igual que violento viento, arrasaron con esas ilusiones de niña inocente.

A veces corro en medio de los árboles hasta quedar sin aliento. Y grito y agito mis brazos. Quiero ser un ave, quiero que todos vean que puedo tener alas reales.

Otros niños dicen que estoy loca, que tengo la cabeza llena de nubes. Otros creen que es porque hablo sola y en realidad veo a seres extraños.

Y no sé a quién creerle. 

¿Algún día podré hacer las pases con todas las versiones que alguna vez fui? Seríamos más de una docena. Pero alguna vez fui cada una de ellas.

Me duelen las manos, mi guitarra tiene un par de cuerdas rotas y mi voz es débil.

No se si quiero volver a jugar, no entiendo las reglas, no entiendo las señas, y no se leer.

¿Alguna vez...? Quien sabe.